Fecha de emisión:

  • 30 de junio de 1979.

Película:

  • «M, el vampiro de Düsseldorf«, película de nacionalidad alemana de 1931. Dirigida por Fritz Lang (1890-1976). Interpretada entre otros, por Peter Lorre (1904-1964), Otto Wernicke (1893-1965) y Gustaf Gründgens (1899-1963). Guión de Thea von Harbou y Fritz Lang. Música de Edvard Grieg y fotografía de Fritz Arno Wagner (B&W). Producida por Nero Film.
  • Estrenada en mayo de 1931. Es la primera película sonora que rodó Lang, pasado un año desde que se incorporó al sonido al cine.
  • En 1951, Joseph Losey realiza un remake de la obra de Lang con la intención de añadir alguna que otra puntualización para hacer más comprensible la trama.
  • Lang se inspiró en los crímenes cometidos en Alemania por diversos homicidas durante los años 20 y la investigación le llevó a conocer a varios asesinos de niños, entre ellos, Peter Kürten.
  • En el año 1933 gana el premio National Board of Review (NBR): Top películas extranjeras.
  • Un asesino de niñas tiene atemorizada la ciudad de Berlín. La policía busca desesperadamente al culpable, deteniendo a cualquier persona mínimamente sospechosa. Los criminales del hampa, furiosos por las redadas que están sufriendo por los acontecimientos, deciden buscarle ellos mismos.

Invitados:

  • José María de Llanos (1906-1992), Sacerdote. Conocido como el Padre Llanos.
  • Ernesto Giménez Caballero (1899-1988), Escritor y diplomático. Embajador de España.
  • Luis Valdés y Colón de Carvajal (1943-2014), Protección personal y comercial.
  • Joaquín Ruiz Mendoza (1915-2003), Sección 26. Ayuntamiento de Valencia.
  • Pascual Olmos Navarro, Presidente Federación Nacional de Judo y Disciplinas asociadas.
  • José Cepeda, Comisario General Seguridad Ciudadana.
  • Rafael Estévez Fernández, Magistrado del Tribunal Supremo.
  • Pedro Gómez Sanz, Asociación Empresarios Centro Comercial.

Un drama donde el crimen y el suspense están servidos. Thriller policíaco que toma del expresionismo alemán su fundamento estético, con un nuevo realismo presente en la dramaturgia. Originalidad y brillantez, que la convierten en una obra visionaria y atemporal. El sádico asesino que sembró el caos en la Alemania de entreguerras. Una obra de culto que se ha convertido en un referente de la Historia del Cine, con gran influencia tanto en el cine negro como en el policíaco. El reflejo del crimen patológico junto a una corrosiva crítica a la sociedad.

“Estoy seguro que se trata de un hombre que pareciera capaz de matar a una mosca. En su estado normal, podría incluso jugar a la ronda con los niños o a las cartas con su mujer. Por lo demás, asesinos como Grossmann o Haarmann no podrían vivir por años, como lo hicieron sin que sus vecinos llegasen a sospechar de ellos». “El peligro a menudo se esconde tras una atractiva carnada: un caramelo, un juguete, una fruta pueden ser las armas del asesino». M, el vampiro de Düsseldorf